El expresidente del Comité Cívico Rómulo Calvo, reconocido por su liderazgo en Santa Cruz, ha sido condenado a cuatro años de prisión por su presunta participación en una compra irregular de terrenos en el Plan 3000.
Este caso, que se remonta al año 2005, ha generado gran controversia en la región. Además, el exalcalde cruceño Roberto Fernández también ha sido sentenciado a cinco años de cárcel en relación a este mismo caso. Ambos políticos han sido encontrados culpables por su participación en la expropiación de terrenos en zonas densamente pobladas del Plan 3000, las cuales fueron destinadas a beneficiar a las personas afectadas por las inundaciones ocurridas en 1983.
El abogado de Rómulo Calvo, Martín Camacho, declaró que su cliente y Fernández han sido condenados por los delitos de contrato lesivo al Estado, conducta antieconómica e incumplimiento de deberes. Estas acusaciones se basan en la venta de un terreno de 55.162,64 metros cuadrados en el Plan 3000 a un valor de $25 por metro cuadrado, cuando el precio valuado en esa zona era de tan solo $8.
Este caso ha causado indignación en la comunidad, ya que la compra irregular de terrenos implica un abuso de poder y una violación de los deberes de los funcionarios públicos. Además, el hecho de que estas transacciones se hayan realizado en una zona afectada por inundaciones agrava aún más la situación, ya que se trata de personas que han sufrido grandes pérdidas y necesitan apoyo para reconstruir sus vidas.
La condena a Rómulo Calvo y Roberto Fernández muestra un claro mensaje de la justicia, que no tolerará actos de corrupción ni malversación de fondos públicos. Además de las sentencias de prisión, es probable que se les impongan multas y se les exija la restitución de los terrenos adquiridos de manera irregular.
Es importante destacar que este caso pone de manifiesto la importancia de la transparencia y la rendición de cuentas en la gestión pública. Los ciudadanos deben exigir a sus líderes una conducta ética y honesta, y estar vigilantes para evitar que se repitan situaciones de corrupción como esta. En resumen, la condena a Rómulo Calvo y Roberto Fernández por su participación en la compra irregular de terrenos en el Plan 3000 en Santa Cruz es un claro ejemplo de la lucha contra la corrupción en Bolivia.
Este caso ha generado gran indignación en la comunidad y destaca la importancia de la transparencia en la gestión pública. La justicia ha enviado un mensaje contundente de que no tolerará actos de corrupción y que aquellos que abusen de su poder serán llevados ante la ley.
Sentencian a Rómulo Calvo por un proceso de hace 18 años
Fotografía principal: El presidente del Comité Cívico pro Santa Cruz, Rómulo CalvO. Foto: captura video